El metal es un material omnipresente: lo encontramos en maquinaria, electrodomésticos y objetos decorativos. Usar pegante para metal es una forma práctica y efectiva de unir metal con metal o metal con otros materiales. En esta guía aprenderás a escoger y a utilizar el pegamento para metal más adecuado para tu proyecto.
La clave para una unión sólida y duradera está en escoger el adhesivo adecuado. Para saber cuál es el mejor pegamento para metal, lo primero es conocer los distintos tipos que existen y escoger el que mejor se adapte a tu proyecto.
Estos son los principales tipos de pegante para metal:
- Adhesivo epóxico. Los epóxicos son adhesivos de alto rendimiento. Se consideran adhesivos de montaje o construcción. Son ideales para rellenar fisuras y reparar o reconstruir piezas desgastadas, tanto en metales como en otros materiales. Funcionan muy bien, además, como pegamento para metal resistente al calor. Se trata de un producto muy versátil que es comercializado en diferentes formatos según sus distintas propiedades y tiempos de curado. Es una de las opciones de pegamento fuerte para metal que ofrece Loctite como parte de su línea de pegamentos extrafuertes.
- Siliconas acéticas. Forman parte de la línea de selladores. Son productos que resisten muy bien la exposición a la humedad y a los rayos UV, por lo que son ideales para sellar uniones entre metal y metal, así como entre metal y otros materiales. Como se trata de productos que poseen propiedades muy específicas, se recomienda seguir al pie de la letra las instrucciones de aplicación que da el fabricante para lograr sellos perfectos, impermeables y resistentes.
- Superpegamentos. Son adhesivos potentes de gran rendimiento que funcionan perfectamente para casi todos los proyectos domésticos. Como Loctite Super Bonder, que es un superpegamento para metal y vidrio, además de cerámica, textiles, caucho, madera y mucho más, por lo que resulta muy útil para reparar adornos, juguetes, utensilios y artefactos del hogar, fijar o reparar piezas en nuestros vehículos o en la oficina, y dondequiera que se necesite unir elementos de forma rápida y efectiva.
Cuando el acabado importa tanto como la resistencia, usar un adhesivo epóxico como pegante para metal transparente ofrece la solución perfecta. Loctite Epoxi Bonder es un pegamento para metal y plástico que crea una unión discreta, muy poderosa, capaz de soportar la exposición al agua y temperaturas extremas. Se trata de un adhesivo epóxico de dos componentes, de acabado translúcido, que cuenta con una práctica jeringa dosificadora. Seca al cabo de pocos minutos y forma una unión de alta dureza.
Uno de los secretos más celosamente guardados por los expertos es el uso de la masilla epóxica para unir o reparar piezas de metal; sobre todo, una tan versátil y fácil de usar como Epoxi Bonder Rollo. Esta masilla epóxica no solo funciona como pegamento superfuerte, sino que se usa para reparar y reconstruir, además de metal, materiales como cemento, yeso, cerámica, vidrio y varios tipos de plástico. Basta darle forma con las manos y colocar en donde se necesite.
Por su parte, Loctite Epoxi Mil es un pegamento fuerte para metal que actúa como una soldadura en frío. Resiste bien las altas temperaturas, la humedad y el contacto con solventes, ácidos y grasas. Es un adhesivo de dos componentes que sirve para rellenar, reparar, soldar y sellar metales como acero, cobre, aluminio, y bronce. También funciona con materiales sintéticos como poliestireno, policarbonato, PVC rígido, plásticos ABS y SAN, y plásticos reforzados con fibra de vidrio.
Pegar metales es más fácil de lo que parece. Lo más importante es contar con el adhesivo adecuado para el proyecto a realizar y luego poner manos a la obra siguiendo estos simples pasos:
- Preparación del espacio de trabajo. Es recomendable trabajar en lugar bien ventilado y con espacio suficiente para tener los materiales necesarios a la mano. Usa papel o plástico para cubrir y proteger los muebles y otras superficies. Examina las partes que quieres unir y haz una prueba de encaje, eliminando cualquier residuo o partícula que pueda interferir con la unión.
- Limpia el metal. Las superficies a unir deben estar limpias y secas. Elimina todo resto de polvo, humedad, grasa y cualquier contaminante que pueda afectar la calidad de la unión, incluyendo las huellas de los dedos. Para aumentar la adherencia del pegamento en superficies muy pulidas, conviene erosionarlas ligeramente usando papel de lija de grano fino.
- Aplica el pegamento para metal, pero no sin antes consultar las instrucciones del fabricante para conocer toda la información específica sobre los usos, la preparación y modo del empleo del producto.
En general, los superpegamentos requieren aplicar una gota del producto por cada dos centímetros cuadrados y medio, aproximadamente, de superficie. Muchas colas epoxi para metales requieren mezclar los componentes del adhesivo y el endurecedor, y luego aplicarlas con una herramienta especializada, mientras que con la masilla epoxi solo se requiere amasar el producto entre los dedos. En cualquier caso, sigue las instrucciones del empaque para conocer los detalles sobre la aplicación, la manipulación y los tiempos de secado, antes de comenzar. - Junta las piezas después de aplicar el producto. Presiona ambas partes, apretándolas bien entre sí para asegurar un contacto uniforme, sin vacíos ni burbujas. Las piezas deben mantenerse firmemente unidas e inmovilizadas hasta que se solidifique la unión, respetando el tiempo de curado indicado en el envase del adhesivo.
Conviene sujetar la unión con prensas o mordazas mientras transcurre el proceso de curado. Algunos tipos de pegamento para metal y plástico, como los epóxicos, requieren de tiempos de curado de alrededor de 60 minutos, mientras que los poliuretanos generalmente se secan y curan más rápido. Y si bien los superpegamentos se secan y adhieren casi de inmediato, no hay que manipular las piezas por alrededor de 8 horas mientras el pegante adquiere su dureza final.